crear una MIPYME

Crear una mipyme: requisitos indispensables

En este post encontrarás una guía de los pasos a seguir para crear una mipyme desde cero. Serán detallados los requisitos legales indispensables y algunos consejillos a seguir para darle vida a nuestra mipyme.

Crear una mipyme pudiera parecernos algo sencillo. Se define una idea, se analizan los requisitos necesarios para implementarla y se entra en acción. Sin embargo, existen requerimientos legales que no podemos pasar por alto y en los cuales pocas veces se repara. En el presente post nos acercaremos a algunas cuestiones relacionadas con esto.

Pasos indispensables para la constitución de una mipyme

De manera general, para crear una mipyme deben realizarse una serie de acciones necesarias para la constitución oficial de la misma. La obtención de las licencias y permisos necesarios, salvando las diferencias que pueden encontrarse entre países o tipos de empresa, son de las cuestiones a tener en cuenta. A continuación, desglosaremos los elementos más importantes y que suelen ser comunes en todas partes. El orden de los mismos pudiera variar en función de las exigencias de cada país. No obstante, este desglose puede servir de norte para todos aquellos que estén pensando en abrir su propia mipyme.

1.    Definir forma jurídica

Una de las primeras acciones a realizar es definir el tipo de empresa que será tu mipyme. En este sentido, deberás considerar desde el tipo de actividad que desempeñará hasta el número de participantes. Existen varias formas cuyos nombres pueden diferir en función de la región o país. Puede ser un único propietario, una sociedad de responsabilidad limitada, una sociedad anónima, una cooperativa, entre otras. Deberás estudiar en qué consisten cada una y las exigencias que conllevan desde lo formal y hasta el capital inicial necesario.

2.    Definir nombre

Este punto puede parecer trivial, pero no lo es. Debes poner tu atención en la selección del nombre que desees y que mejor se ajuste con tu mipyme; a fin de cuentas será una de las bases de la marca que querrás impulsar. Sin embargo, aunque en ocasiones es un paso relativamente sencillo, puede tornarse complejo, sobre todo, cuando el nombre que deseas ya está tomado por otro negocio. Necesitarás encontrar un nombre que no esté en uso y certificar en la entidad correspondiente que efectivamente es así. Te recomendamos que el nombre elegido sea original, sencillo para su fácil memorización, y que represente realmente a tu mipyme.

3.    Capital inicial

Cada forma jurídica establece el monto determinado de capital inicial necesario para constituir la empresa. Esto varía, así que debes informarte bien al respecto. No obstante, este es el punto donde creas la cuenta bancaria empresarial en la cual podrás depositar el capital inicial necesario. Igualmente, deberás solicitar el certificado de depósito en el banco, lo cual servirá para acreditar el capital social en la constitución de la empresa.

4.    Elaboración de estatutos sociales

Los estatutos sociales son aquellos que regirán la actividad de la empresa y sus representantes. En ellos quedarán recogidas las normas de funcionamiento de la empresa que luego se integrarán en la escritura pública de su constitución. Otros datos que se recogen en este punto son: denominación social, domicilio social, objeto social o actividad de la empresa, capital aportado, sistema de administración, acuerdos, entre otros. También pueden incluirse otros elementos como el reparto de dividendos o el proceso a seguir en caso de que la empresa se disuelva.

5.    Acta o escritura de constitución

Aquí es donde se realiza la constitución oficial, o sea, se le da vida a tu mipyme. En este documento quedan incluidos los aspectos básicos y generales que definen tu naciente empresa; se trata de: nombre de la empresa y de sus propietarios, objetivos, tipo de empresa, capital inicial, administración, naturaleza y objeto social, representantes legales, entre otros elementos. La obtención de la correspondiente escritura debe tramitarse por medio de un notario público.

6.    Cuestiones de administración tributaria

Ahora corresponde realizar los trámites pertinentes de inscripción en la administración tributaria. En este punto deberás informarte bien de cómo se realiza en tu país y cuáles son las particularidades correspondientes según tu tipo de empresa.

7.    Registro Mercantil

La inscripción de tu mipyme en el Registro Mercantil brinda plena competencia y capacidad jurídicas a la misma, así seas empresario individual o social. El proceso de inscripción se realiza a través de la Cámara de Comercio de tu país. Este paso de inscripción puede ser voluntario en determinadas forma jurídicas, así que debes informarte bien al respecto.

8.    Registro público de propiedad

Este registro incluye no solo a la empresa en general sino también a los bienes inmuebles que la conforman. Asimismo, se integran los fines, objetivos y metas comerciales. Este registro suele realizarlo el notario, pero deberás informarte bien de cómo se lleva a cabo este proceso en tu país.

9.    Seguridad social

Se recomienda la inscripción de la empresa en la Seguridad Social ya que este paso da la posibilidad de contratar personal, en caso de ser necesario. Igualmente, incluye la obligación del empresario de afiliar a los trabajadores que contrate si es que no estuvieron afiliados en el momento de constitución de la empresa.

10.  Registro de patentes, marcas, productos y servicios

En este paso es donde realizas lo jurídicamente necesario para proteger tu empresa en términos de patentes, marcas, productos, servicios, y de propiedad intelectual, uno de los activos más valiosos. Asimismo, con el registro de marca puedes proteger signos distintivos de tu empresa, como palabras, frases, imágenes o símbolos. Este punto es muy importante ya que el hecho de haber inscrito la empresa en el Registro Mercantil no la protege en estos términos.

Otros aspectos a tener en cuenta

Si bien ya hemos enunciado un conjunto de pasos que deberás seguir para establecer tu empresa legalmente hablando, debes saber que estos pueden no ser los únicos. En dependencia de dónde te encuentres o dónde desees establecer tu empresa, pudieras encontrarte en la necesidad de realizar más o menos pasos. En tal sentido, a continuación mencionaremos algunos que también pueden serte necesarios.

–          Solicitud de las licencias necesarias

En dependencia de la actividad que vaya a realizar tu empresa, es posible que debas solicitar determinadas licencias o realizar otros trámites. Infórmate bien al respecto para que no te lleves sustos innecesarios.

–          Inscripción en organismos pertinentes

En función del camino que vaya a transitar la empresa en términos de su actividad y objetivos, existe la probabilidad de que debas inscribirla en determinados organismos. Algunos de esos organismos pueden ser los relacionados con el medio ambiente o la salud.

Ya casi listos para abrir

Habiendo superado con éxito todas las exigencias legales, es hora finalmente de poner en marcha a tu recién constituida mipyme. Para ello, dejamos a tu consideración algunos consejillos muy oportunos a tener en cuenta.

·         Hazte con un buen software de gestión

Estás empezando y no puedes darte el lujo de andar con titubeos. Consigue un buen software como sistema de gestión de propiedad o PMS (Property Management System) y así, con un adecuado dominio del mismo, podrás empezar con el pie derecho y agilizando procesos.

·         Define tu público meta

Deberás tener bien claro a qué tipo de clientes deseas atraer. En tal sentido, tus esfuerzos podrán concentrarse en ellos, en lugar de dispersarse.

·         Lanza una potente campaña de marketing

Al partir de cero, nadie te conoce, así que querrás darte a conocer lo antes posible. Para ello, una buena estrategia de marketing es justo lo que necesitas. Así, comenzarás a atraer clientes lo antes posible.

·         Flexibilidad como palabra de orden

La probabilidad de que algo deba ser modificado es siempre alta, sobre todo al inicio. No es hasta que se choca con la realidad que nos damos cuenta de lo que funciona y lo que no. Así que estate preparado para variar determinadas concepciones según lo demande la situación.

·         Brinda tu producto o servicio siempre impecablemente

Esto es muy importante cuando comienzas, pero también en tu trabajo diario. El cliente no es culpable de las eventualidades que puedan ocurrir, así que nunca se lo hagas saber transmitiéndole con tu conducta que algo no está yendo como debería. Cuando estés trabajando, asegúrate de siempre hacerlo óptimamente.