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Los empleos de tiempo completo suelen demandar dedicación y gran parte de nuestro tiempo más productivo. Pero tener un trabajo a tiempo completo no es malo. De hecho, resulta positivo si disfrutamos de nuestro trabajo, ya que nos permite satisfacer aspiraciones profesionales, sumar experiencia y planificar la jubilación. Sin embargo, cuando la remuneración no es suficiente o no estamos conformes, surge la necesidad de diversificar ingresos, lo cual puede ser una estrategia efectiva para mejorar nuestra situación económica mientras mantenemos la estabilidad de un empleo fijo.
Tabla de contenidos
Estrategias para diversificar tus ingresos mientras mantienes un empleo de tiempo completo
Aunque parezca ciencia ficción, sí es posible diversificar ingresos mientras se mantiene un empleo de tiempo completo. Aunque arrugues el ceño, esto es posible y a veces necesario. Con algo de planificación y enfoque, se pueden crear nuevas fuentes de ingresos sin comprometer tu rendimiento laboral ni tu calidad de vida. Así que, si quieres conocer estrategias para lograrlo, aquí ponemos a disposición algunas bastante prácticas y realistas.
Revisa tus habilidades y exploras nuevas posibilidades
Hay una máxima que a veces perdemos de vista, y es que todos tenemos talentos que pueden ser monetizados. Piénsatelo un momento, ¿para qué cosas tienes habilidades y no las realizas, o no las has pensado, como alternativas para monetizarse? Quizás se te da bien la escritura, o la pintura, o el diseño; puede que seas bueno en la cocina, o reparando cosas, o incluso jugando videojuegos. Ahora, imagínate la posibilidad (real) de que otras personas necesiten servicios como esos, y estén dispuestos a pagar por ello. Pues ahí está tu oportunidad de convertir una habilidad supuestamente “inútil” en una fuente generadora de ingresos alternativos.
Pues bien, aunque también puedes emplear el tradicional sistema del “boca a boca”, existen diversas plataformas online para promocionar trabajos como estos. Dichas plataformas suelen contener miles de usuarios, entre clientes y trabajadores independientes (o freelancers), que buscan y promocionan diversos servicios. Tú puedes ser uno de ellos. Puede que pienses que eso sería trabajar doble, o sobrecargarte, y tal vez te sientas así al inicio. Pero si te propones monetizar algo que disfrutas hacer, pues será como si no estuvieras trabajando. Piénsatelo, a veces no es tan complicado como pudiera parecer.
Realiza inversiones
El dinero que no se mueve no crece. Guardarlo puede mantenerlo seguro, pero no lo multiplicará, y eventualmente se agotará. Por eso, invertir es una excelente manera de diversificar ingresos. Invertir significa destinar tu dinero a opciones que puedan generar beneficios superiores a lo invertido. Si no sabes dónde empezar, aquí tienes algunas alternativas:
- Bolsa de valores: Fondos indexados, ETFs y acciones de dividendos son opciones ideales para principiantes.
- Bienes raíces: Requiere mayor capital, pero permite generar ingresos pasivos, por ejemplo, alquilando una propiedad, o revalorizarla para venderla a un precio superior.
- Criptomonedas: Activos digitales con altos rendimientos, pero también alta volatilidad. Si decides optar por ellas, estudia bien el mercado.
- Capital privado: Inversión en empresas no cotizadas, enfocada en obtener beneficios a largo plazo.
- Crowdfunding y crowdlending: Consisten en financiamiento colectivo para proyectos o préstamos, generando intereses sobre lo invertido.
- Arte y coleccionables: Adquirir piezas cuyo valor puede aumentar con el tiempo, permitiéndote obtener una ganancia al venderlas posteriormente.
Sea cual sea tu elección, infórmate bien antes de invertir. Investiga cada opción, identifica la que mejor se adapte a tus metas y, si es necesario, busca la guía de un asesor. Comienza con inversiones pequeñas para ganar experiencia y confianza, lo que te permitirá asumir mayores riesgos de forma calculada en el futuro.
Súmate a la economía colaborativa
Muy a tono de estos tiempos resulta la economía colaborativa. Como su nombre lo indica, es un modelo económico basado en la colaboración y el intercambio de bienes, servicios y recursos entre individuos. Este tipo de modelo suele estar facilitado por plataformas digitales, desde la cuales se propone y accede a productos y servicios sin necesidad de poseerlos. En este sentido, puedes pensar qué tienes y puedes ofrecer, con lo cual recibirás ingresos. Por ejemplo, un espacio de tu casa subutilizado que perfectamente alguien lo pueden rentar para establecer una tienda de conveniencia. O un automóvil que no uses y que puedas rentar o usarlo tú mismo en actividades de delivery o taxi. Con esto, al mismo tiempo que se generan ingresos, también se promueve la sostenibilidad y el uso eficiente de los recursos existentes.
Genera ingresos pasivos
Muy similar a lo anterior, aquí queremos hacer referencia a esos bienes o patentes que tienes a tu favor y que pueden generarte ingresos sin tener tú que hacer mucho. Por ejemplo, si tuvieras una casa determinada, pudieras alquilarla y así te aportaría mensualmente una ganancia. Asimismo, los derechos de autor sobre una creación, como una pieza musical o una obra literaria, también pueden reportarte ganancias sin necesidad de que hagas nada más extra.
Inicia un negocio en paralelo
Sin duda alguna, tener un negocio propio que funcione en paralelo a tu empleo de tiempo completo es una buena estrategia de diversificación de ingresos. Esto también se conoce como side hustle y es realizado por muchas personas. Tu negocio paralelo puede ser la venta de alimentos caseros, comidas para eventos, productos hechos a mano, ropa de segunda mano, etc. Incluso, puedes también desempeñar acciones intangibles, como, por ejemplo, ser consultor en determinado campo. Las posibilidades son muy diversas, solo necesitas identificar qué podría resultar exitoso en tu caso concreto. La idea es que este negocio coexista con tu empleo sin interferir con tus responsabilidades principales.
Haz crecer tus ahorros
Algo similar a la inversión, la idea aquí es que el dinero que estás ahorrando también pueda ir creciendo con el paso del tiempo. Porque tienes que tener claro que diversificar ingresos no siempre se trata de trabajar más, sino de hacer que tu dinero (o tus bienes) trabaje para ti. En este caso, puedes considerar la posibilidad de depositar tus ahorros en cuentas de alto rendimiento, o en certificados de depósito. Si bien los rendimientos pueden no ser tan altos, es una forma segura de generar ingresos extra sin esfuerzo adicional.
Comienza a crear contenido online y productos digitales
La era de Internet y las redes sociales han abierto un diapasón enorme de posibilidades, incluso muchas aún inexploradas y no descubiertas. ¿Cuántas veces te sumerges en tus redes sociales y pasas largo tiempo en ellas como entretenimiento? Pues lo mismo hacen millones de personas, y eso que consumen son contenidos creados por otras personas igual que tú. Y por esa simple razón, esos creadores de contenido reciben ingresos. Un simple like o una visualización pueden hacer la diferencia que implica la ganancia haciendo algo sencillo y que a otros les gusta.
Para hacer esto no hacen falta grandes recursos, solo necesitas imaginación y originalidad. Puedes crear una cuenta o canal y hablar sobre algo que te apasiones; tal vez sobre recetas de cocina, sobre maquillaje, sobre estrategias de programación, sobre trabajo de diseño, tecnología, finanzas, y un largo etc. Luego necesitas ser sistemático y disciplinado con tus publicaciones, y ojo: sé responsable con lo que publicas. Esto implica crear un contenido veraz, seguro y útil. Así, cuando crezca tu audiencia, podrás monetizar a través de publicidad, patrocinios o marketing de afiliados. Si bien el proceso puede ser algo lento, puede llegar a dar buenos frutos. En este sentido, para este fin puedes considerar plataformas como YouTube, Instagram, o incluso un blog.
Por si fuera poco, no olvides que también los productos digitales pueden ser una fuente de ingresos. Algunos como los ebooks, plantillas o cursos online suelen ser altamente consumidos. Ten en cuenta que este tipo de ingresos es escalable; o sea, trabajas una vez y puedes seguir obteniendo ganancias por mucho tiempo.
Aprende a administrar tu tiempo sabiamente
Por último, y no menos importante, la estrategia de administración de tu tiempo debe ser óptima. Porque si después de 8 horas de trabajo tienes atrasos en tareas que no pueden esperar, te sobresaturarás y terminará siendo improductivo e inviable. Por ello, establece límites claros y jerarquiza tus tareas. Considera el uso de aplicaciones de productividad y herramientas como calendarios para organizarte. Recuerda que la diversificación de tus ingresos no puede ir en detrimento de tu bienestar físico y mental.
Ciertamente, diversificar ingresos mientras se mantiene un empleo de tiempo completo es una buena idea. Esto no solo te brinda seguridad financiera, sino que te abre las puertas a nuevas experiencias y oportunidades. Aunque el camino parezca angosto e intimidante, comienza de a poquito. Ya verás que, con el tiempo, constancia y disciplina, los esfuerzos de hoy pueden llegar a ser la tranquilidad del mañana.
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