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Emprender un negocio en casa es posible. Aunque pudiera parecer una locura, no son pocos los emprendedores que inician su negocio en el propio hogar y logran llevarlo lejos. No es cuestión de grandes inversiones, ni tampoco implica la pérdida de un espacio de tu casa. Se trata de volcar todo lo necesario hacia un proyecto serio y que estemos dispuestos a hacer crecer.
Muchos se preguntan cómo es posible emprender un negocio en casa y que logre ser exitoso y rentable. De por sí esta es una pregunta complicada, pues no existe una receta infalible que se aplique a todos por igual. Lo que sí no cabe dudas es que si te lo propones, debes trabajar en ello con seriedad y constancia, sin pretender que por estar en tu propia casa puedes permitirte relajarte.
Tabla de contenidos
Cómo emprender un negocio en casa
Si bien los pasos para emprender en casa pueden ser tan variables como lo son las propias personas y los negocios potenciales, es posible destacar algunos tips que son útiles para todos ellos. Por eso ponemos a tu consideración estas recomendaciones que te ayudarán a saber cómo emprender un negocio en casa.
«Una gran ventaja de emprender desde casa es la reducción de costos operativos. No tengo que preocuparme por alquilar un local comercial o contratar empleados adicionales. Esto me permite destinar más recursos a la inversión en mi negocio y obtener un mayor margen de ganancia».
Sofía Martínez, Healthy Bites, Argentina
Evalúa tus talentos y habilidades
Comienza por lo básico, haciéndote preguntas que te ayuden a conocer en qué eres bueno. ¿Qué se te da mejor? ¿Qué tienes facilidad para hacer? A veces algo trivial y en lo que poco hemos reparado puede llegar a convertirse en el núcleo de nuestro futuro emprendimiento. Ya sean talentos propios de tu persona o habilidades y conocimiento aprendidos gracias a diversos estudios. Por ejemplo, si te gusta y eres bueno en las artes plásticas, o en el diseño, o si se te da bien la comunicación, los idiomas, o incluso la cocina, tal vez tu proyecto de emprendimiento pudiera empezar por ahí.
Estudia las necesidades de tus alrededores
No bastan con quedarte en lo que te gusta o te sale bien. Si no tienes un público que lo necesite, y que esté dispuesto a pagar por eso, pues no te comprarán, y por tanto, tu negocio no llegará a ser rentable. Tienes que estudiar las principales necesidades de tus alrededores y analizar cuál o cuáles eres capaz de cubrir con tus habilidades; o incluso, cuál estás dispuesto a asumir, aunque no sea tu fuerte. Lo que se trata es de que, combinando tus habilidades con las necesidades por satisfacer, puedas pensarte un negocio efectivo y que tenga potencial llevarlo a cabo desde tu casa.
Estudia qué negocio funcionaría desde tu casa
Tienes que tener presente que no todos los negocios que te propongas pueden ser desempeñados desde tu casa. Tan solo imagina que vives en un vecindario tranquilo, el ir y venir de los clientes, así como la aglomeración de personas puede molestar a tus vecinos y provocar problemas. Asimismo, si has pensado establecer un puesto de comida, puede que el espacio de tu hogar no tenga las condiciones mínimas para desarrollarlo.
Por ello, es importante que tengas identificado el negocio posible a emprender a partir de la adecuada combinación lo que se te da bien y de la necesidad que te planteas cubrir. Teniendo esto, corresponde entonces analizar la factibilidad del desarrollo de esa idea en tu casa y decidir si es apropiada o no. Así, deberás ir transitando de una idea a la otra hasta encontrar aquella que mejor se ajusta a tu realidad.
Asimismo, evita encapricharse en una idea que aunque atractiva, no estás del todo dispuesto a reealizar lo que esta requiere. Por ejemplo, si no te gusta estar saliendo de tu casa, puede que trabajos que te demanden la salida constante no sean apropiados. Por tanto, deberías eliminarlos de tu lista de negocios posibles.
Saca tus cuentas
Llegó el momento de tomar lápiz y papel y comenzar a hacer tus cuentas. Ya sea a la vieja usanza o empleando tu más moderno smarthphone, lo importante aquí es que te sientes a sacar tus cuentas. Esa idea que planeas llevar adelante, ¿cuántos ingresos puede generarte al mes?, ¿logras cubrir con ello los gastos realizados?, ¿tienes algún margen de ganancia? Estas pueden ser algunas preguntas a considerar para guiarte a la hora de realizar tus cálculos. No se trata de un análisis complejo, sino de uno básico que te permita saber si la idea que estás valorando va a ser mínimamente rentable. Si al final del análisis tus números son negativos, o tu ganancia es ínfima, lo más recomendable es que redirecciones tu proyecto de negocio en casa hacia otro que te genere verdadera rentabilidad.
«Emprender desde casa me ha permitido ahorrar dinero y tiempo en desplazamientos y dedicarlo a tareas productivas. Además, tengo la libertad de trabajar en un ambiente cómodo y personalizado, lo cual aumenta mi productividad y creatividad».
Elena Sarmiento, Terapeuta natural, Perú.
Realiza un plan de negocio
Una vez que hayas transitado por los pasos anteriores y hayas encontrado una idea de negocio en casa que puedas realizar y que tenga buenas posibilidades de ser rentable llegó el momento de realizar un plan de negocio. Un plan de negocio no es más que la estructuración de tu idea de emprendimiento teniendo en cuenta todos los elementos que influyen en él, desde lo más básicos hasta los más complejos. Este es un punto crucial, pues puede que después de analizar costos, gastos, ingresos, necesidad de inversión, recursos, impuestos, etc., te des cuenta que este negocio no será viable. Si esto ocurre, te tocará descartar esta idea y pasar a la siguiente con mejor potencial.
Establece delimitaciones físicas y de tiempo dedicado a tu negocio
Es importante que delimites el espacio físico que destinarás para tu negocio. Sea cual sea el emprendimiento que vayas a desarrollar, necesitará de un espacio en el que enmarcarse. Si es un negocio que requiere un espacio físico, como por ejemplo, un lugar donde colocar un mostrador para exhibir productos, deberás acomodar un local para ello. Necesitas establecer en casa un lugar que sea exclusivo para tu negocio.
Si por el contrario, tu emprendimiento se enfoca en trabajo por Internet, igual es recomendable destinar un sitio en la casa en el que te sientas cómodo para realizar ese trabajo. Puede ser perfectamente una mesa con tu computadora, en un cuarto donde cuentes con la iluminación, el espacio y la tranquilidad que precises para realizar el trabajo apropiadamente. Todo esto te ayudará a establecer la debida separación entre lo que es trabajo y lo que es tu hogar; así evitarás caer en el mal hábito de irrespetar horarios y responsabilidades, tanto laborales como hogareñas.
Lo mismo se aplica a los horarios. El hecho de que estés en tu casa no te da licencia para holgazanear ni ser irresponsable. Tu trabajo necesita que le dediques un horario con seriedad, y al mismo tiempo que este horario tenga un fin. No es recomendable ser negligente con esto, pues también necesitas dedicarte tiempo a ti y a tu vida extra-laboral. Deberás establecer tu horario de trabajo, donde también reflejes los tiempos de alimentación, descanso, e incluso de recibir clientes. Una vez definido, ¡respétalo!
Conversa sobre el tema con las personas que viven contigo
Si te encuentras en el caso de que compartes tu casa con algún familiar, amigo o compañero de renta, deberás hablar con ellos. Tendrás que informarle sobre tus intenciones y, dado que el caso lo requiere, solicitar su consentimiento para emprender en la propia casa. Ya sea que los invites a involucrarse en tu negocio si lo necesitas, como si solo quieres indagar su parecer, lo cierto es que por nada del mundo puedes saltarte este paso. Si vivieras solo no hay problemas, pero si vives con compañía, tienes que asegurarte de que tu negocio no terminará molestando la convivencia con los demás inquilinos de la casa. De lo contrario, deberás buscar alternativas.
Asimismo, si tu negocio se centra en el trabajo online, igual deberás comunicar a tus familiares la importancia de tus horarios de trabajo. Tendrás que hacerles entender que aunque estés en casa, el horario de trabajo debe respetarse. Esto a veces puede ser complicado, pues el hecho de verte en casa da la sensación de que estás disponible todo el tiempo y no es así. Por ello la importancia del establecimiento de límites de tiempo y de espacio físico para tu trabajo.
«Una de las dificultades de emprender desde casa es la falta de separación entre el trabajo y la vida personal. A veces es difícil desconectar y encontrar un equilibrio saludable. Sin embargo, con una buena organización y disciplina, es posible superar este desafío».
María Fernández, EcoArt, México.
Prepárate en los temas legales
Emprender un negocio en casa también implica deberes legales. Para ello deberás estudiar lo que a leyes, licencias e impuestos se refiere. No puedes permitirte empezar un negocio y descuidar un elemento sumamente importante como este que puede dar al traste con tu proyecto. Infórmate bien y toma toda las medidas que precises para comenzar y desarrollar tu negocio en orden.
Manos a la obra
A partir de aquí ya deberás sumergirte en el mundo del emprendimiento y comenzar a desarrollar los conocimientos básicos para empezar a emprender. Tocará comenzar desde cero a iniciar esta idea de negocio que en un futuro puede crecer mucho más, y quien sabe si logre escalar, ya sea que te decidas ser freelancer o te conviertas en una mipyme. Te tocará pensar en el nombre de tu negocio, tu marca, tu identidad, la elaboración de tu presupuesto, los requisitos legales y jurídicos, el marketing para tu emprendimiento, y unos cuantos etcéteras. Comienza entonces a edificar desde los mismos cimientos lo que deseas que se convierta en tu negocio.
Otros elementos a tener en cuenta
- Apóyate en la tecnología para impulsar tu emprendimiento. Usa soluciones tecnológicas para facilitar todos los procesos de tu negocio, como la contabilidad, los pagos y cobros, el servicio al cliente, entre otros.
- Estudia bien tu mercado y define tu público meta. Establece y pon en práctica las estrategias más recomendables para atraer a tus clientes potenciales.
- Mantén un seguimiento de cerca a tus finanzas. Procura unas finanzas saludables.
- Crea un sitio web para tu negocio y promociónate también en la esfera digital. Utiliza las redes sociales a tu favor.
- Valora la necesidad de buscar financiamiento si tu negocio así lo requiere.
- Establece prioridades en función de las necesidades de tu negocio.
- Prepárate tanto para los periodos buenos como para lo más difíciles. Mantente positivo y no pierdas la constancia y la tenacidad
En conclusión, emprender un negocio en casa ofrece numerosas ventajas y oportunidades para aquellos que desean iniciar su propio camino empresarial. La flexibilidad horaria, el ahorro en costos operativos y la comodidad de trabajar en un entorno personalizado son aspectos destacados. Sin embargo, también se deben enfrentar desafíos, como la dificultad para separar el trabajo de la vida personal y la falta de interacción social directa. Para tener éxito, es importante contar con una planificación sólida, mantener la disciplina y aprovechar al máximo las herramientas y recursos disponibles en línea. Con dedicación y determinación, emprender desde casa puede ser una opción exitosa y gratificante.
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