Para emprender, deberás prepararte en una serie de aspectos que tarde o temprano necesitarás poner en práctica en tu negocio. Tu éxito dependerá de tu preparación y dedicación.
Iniciar un emprendimiento está siempre rodeado de incertidumbres. Sin embargo, existen formas de disminuir esa inseguridad, y la preparación es imprescindible para ello. Si bien la innovación y la creatividad son buenas aliadas en los emprendimientos, estas no implican necesariamente actuar impulsivamente ni de manera improvisada. Se requiere disciplina, constancia y responsabilidad pues, al fin y al cabo, estarás comenzando una empresa que pretende ser rentable y próspera.
Tabla de contenidos
Conocimientos básicos para emprender
Si bien no es necesario cursar un doctorado para emprender un negocio, tampoco es recomendable comenzarlo totalmente en cero. Existen determinados elementos propios de la actividad emprendedora que nos exigen al menos conocer algunas nociones de ellos. Así, cuando debamos poner en práctica esos conocimientos o enfrentarnos a actividades que lo exijan, podremos sortearlas de una mejor manera. A continuación, te compartimos algunos campos en los cuales es bueno prepararse un poco en vistas de emprender.
Economía
Conceptos como los de producción, consumo, distribución, micro y macroeconomía, te serán necesarios para tener una visión global del mundo donde te estás adentrando. Saber interpretar el comportamiento del mercado y cómo este influye en tu negocio será trascendental; así podrás ajustarte a ese ecosistema, aprovechando lo que te beneficie y evitando lo que te perjudique.
Contabilidad y finanzas
Necesitarás saber un mínimo suficiente de estas materias. Recuerda que te enfrentarás directamente a la contabilidad de tu proyecto de emprendimiento, y esta es un área muy sensible que no debe fallar. Deberás prepararte en términos de gestión del presupuesto, movimientos del mercado, rentabilidad, fichas de costos, salario del personal (si cuentas con ello), pagos de impuestos, gastos fijos y variables, entre otras cuestiones relativas a las finanzas. No es recomendable improvisar, y mucho menos en este tema. Dominar tus finanzas te permitirá analizar el crecimiento de tu empresa, tomar decisiones ajustadas a la realidad y realizar proyecciones futuras.
Marketing
Nunca subestimes el marketing, una buena estrategia puede elevarte tan rápido como una mala destruirte. El marketing al inicio te servirá para darte a conocer y poco a poco te ayudará a captar clientes y fidelizarlos. Si no puedes invertir mucho en marketing, siempre puedes recurrir a estrategias que no implican grandes inversiones pero que sí dan buenos frutos, como el marketing online. No obstante, este requiere de un mínimo de conocimientos, sobre todo para lograr una efectiva visibilidad y construir una buena imagen de tu marca. Igualmente, necesitarás saber cómo realizar campañas en las redes sociales y cómo sacar provecho del marketing de contenidos.
Comercial
Sea cual sea el servicio o producto que venda tu empresa, necesitarás prestarle mucha atención al departamento comercial. Aunque pueda no parecerlo, este apartado es sumamente importante pues de él depende en gran medida la posibilidad de prosperar y tener éxito. De las ventas que logres realizar dependerá ineludiblemente el avance de tu negocio. Este apartado está en estrecha relación con el marketing, así que debes ser capaz de entender cómo integrarlos eficientemente. Por eso, será necesario prepararte bien en estos temas, sobre todo en estrategias de venta y de captación de clientes.
Jurídico y fiscal
Para comenzar a emprender se requiere un mínimo de conocimientos jurídicos. Pensemos escenarios como los siguientes: definir el tipo de sociedad bajo la cual se va a crear la empresa, así como sus características, ventajas y obligaciones; asumir el proceso de elaboración y firma de contratos con clientes, proveedores y tus propios empleados; con solo estos ejemplos podemos percatarnos de la importancia de la esfera jurídica en una empresa. La necesidad de asesoramiento jurídico en las diferentes facetas del desarrollo de tu empresa será inevitable, así que mientras mejor preparado estés, mejor afrontarás estas fases y mayor será el aprovechamiento que hagas de ellas.
Recursos Humanos
Cuando tu empresa comience a crecer y necesites contratar personal, deberás estar preparado para este momento. El proceso de selección del personal idóneo para el puesto que debe ocupar, así como su retención en tu empresa, son apenas algunos de los elementos con los que tendrás que lidiar. Emprender significa también aprender las mejores maneras de tratar a tu personal. Ello será una herramienta que podrá serte de mucho provecho para tu negocio en todo momento.
Tecnología
Aunque tu negocio no tenga relación con elementos tecnológicos, no es recomendable desentenderse de ellos. El avance constante del mercado te obliga a estar siempre actualizado en este sentido, y si queremos avanzar a buen ritmo, debemos tomar la tecnología como nuestra aliada. Las aplicaciones y dispositivos tecnológicos facilitarán el desarrollo de tu empresa, debes estar preparado para integrarlos en tu actividad.
Idioma
Nunca está de más explorar nuevos horizontes. No sabes cuándo te será útil ni cuándo necesitarás dominar otro idioma por las propias demandas de tu empresa. Con el marketing online y las campañas por redes sociales, tu negocio será capaz de llegar a lugares insospechados que tal vez demanden de ti el dominio de otra lengua. No solo para captar clientes sino también para llegar a nuevos proveedores, modernizarte e incluso internacionalizar tu negocio. Aprender a desenvolverte en otro idioma te será de mucho provecho.
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