Conoce los principales costos asociados a los pagos internacionales

¿Tu negocio busca exportar? Conoce los costos asociados a los pagos internacionales

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A veces nos sucede que realizamos pagos o cobros internacionales y el monto final invertido no es precisamente igual al recibido o enviado por la contraparte. Es como si por el camino hubiera que pagar peaje en una autopista. Pues precisamente eso habla de la existencia de otros costos que están asociados a los pagos internacionales. Veamos esto más de cerca.

Costos asociados a los pagos internacionales

Es sumamente importante tener claridad de todos los costos que pueden venir convoyados con lo que pudiera parecernos un simple pago. Pero cuando este pago tiene la particularidad de ser internacional, comienza a introducir variables extrañas en la ecuación. Imaginemos un simple pago en un mercado, vemos lo que queremos, lo tomamos y pagamos al vendedor el precio que le ha asignado a ese producto. Pero en lo que no reparamos es que ese precio probablemente ya tenga incorporado, además del costo de producción, otros porcientos correspondientes a impuestos, ganancias del vendedor, entre otros.

A nivel internacional, ocurre exactamente lo mismo. No es como que podamos estirar la mano y pagar directamente a alguien que está lejos. Para realizar un pago internacional debemos emplear intermediarios que hagan ese proceso por nosotros. Esos intermediarios son lo que conocemos como medios de pagos internacionales, y por sus servicios (el de acercarnos a nuestro cliente o proveedor) cobra su comisión. De ahí que algo que cueste 10 dólares, por ejemplo, requiera de nosotros pagar 15 dólares (estimado) para poder ejecutar dicha compra. Esto significa que necesitamos estar claros de que una transacción internacional implica abonar un poco más de lo que cuesta aquello que vayamos a comprar o pagar. Analicemos entonces aquellos costos que pueden estar asociados a los pagos que realicemos internacionalmente.

Comisión o tasa bancaria

Una comisión de pago internacional es la tasa aplicada cuando un pago se realiza empleando un medio, por ejemplo, una tarjeta, que está asociada a un banco emisor que no se encuentra en el mismo país del banco que recibe el pago. En esencia, son porcentajes que las instituciones financieras, especialmente los bancos, cobran a sus clientes por las operaciones realizadas. Esto se realiza bajo el concepto de prestación de servicios (transferencias o retiros) o productos (tarjetas o chequeras). O sea, como son ellos los que realizan el trabajo que tú no puedes hacer, cobran una comisión por ello. La decisión de cuanto sea esa comisión recae en los propios bancos, de hecho, ahí está uno de los factores de competencia en la atracción de clientes.

Asimismo, hay que tener en cuenta otros elementos que se agregan a estas comisiones. Por ejemplo, si el banco tiene que realizar una conversión de divisa, esto puede implicar también un costo adicional. De hecho, suele ser un costo asociado que por lo general puede constituir un cargo oculto. En cualquier caso, tienes que investigar bien estos costos porque varían en función del proveedor de servicios de pago que emplees (PSP), de los bancos implicados, del monto a transferir, etc.

Tasas de cambio

Muchas veces nos encontramos en la necesidad de realizar un pago de algo que se encuentra en otro país y, por ende, en otra moneda. El proceso de cambio de divisa, como no lo realizas tú sino tu proveedor de pago, también tiene un costo. Aunque este punto se parece al anterior, no son lo mismo. En el anterior, se cobra el servicio de conversión de divisa en la transacción. Pero en este caso, la tasa de cambio está asociada al valor de la divisa y no a la propia transacción. No obstante, las tasas de cambio de monedas pueden cobrarse junto a las comisiones internacionales.

Tener presente esto es vital a la hora realizar pagos internacionales. Las tasas de cambio son muy variables y no siempre se cobra por el cambio la tasa exacta que pueda uno buscar en Google ese día. Asimismo, en función del tipo de pago que debas realizar, también puedes decidir entre un cambio de divisa al contado (spot) o a plazo (forward). En el primer caso, el cambio se realiza en las próximas 48 horas y al costo en que esté la tasa de cambio en ese momento. Por el contrario, el cambio de divisa a plazo implica un acuerdo entre ambas partes cuyo pago se realizará en el futuro, pero con previo establecimiento de la tasa de cambio con la que trabajarán. Así, se elimina la incertidumbre del movimiento que pueda tener la tasa de cambio más adelante y, en cualquier caso, cubre las pérdidas.

Costos de transacción

Por si fuera poco, existen otros costos asociados a la propia transacción. Imagina que vas a exportar una mercancía, ¿cómo haces para enviar esa mercancía, llegue a su destino, y en buenas condiciones? Pues por ahí van los otros costos de transacción. Los gastos asociados al envío de una mercancía deben ser siempre considerados, porque en dependencia del tipo de incoterm seleccionado, deberá pagarse determinada cantidad por ello.

Pero los costos no se quedan ahí. La carga que envías, deberás asegurarla, pues sin dudas no querrás que nada le ocurra por el camino que te haga perderla y, por ende, no recibir su pago. Asimismo, también deberás contemplar las posibles inspecciones aduaneras, así como aranceles según la mercancía. Como puedes ver, ya tu producto no costará simplemente el precio original, sino que se verá incrementado por todos los costos de transacción.

Impuestos y aranceles

Sin dudas de los más conocidos costos asociados a los pagos internacionales. Esto se debe a que son montos que debemos abonar por el procedimiento que estamos haciendo de exportar o importar determinada mercancía. Cuando transportamos internacionalmente algún producto o bien, los envíos están sujetos a aranceles e impuestos de acuerdo a las leyes aduanales de los respectivos países. Generalmente se tiene en cuenta el valor del producto, el origen y el tipo de mercancía de la que se trate.

Un arancel es un tipo de impuesto que se aplica a las mercancías internacionales. Lo cobran las aduanas como ingresos del gobierno para proteger la industria local. Por su parte, los impuestos son tarifas impuestas por el gobierno a las mercancías importadas que fueron compradas fuera del país. El archiconocido IVA es un ejemplo de estos impuestos. Por lo general, los aranceles e impuestos los paga el importador. El exportador suele pagar los impuestos de exportación. Como ves, aunque ambos términos (arancel e impuesto) casi siempre se usan juntos, no son lo mismo.

Estas obligaciones fiscales tienen lugar tanto en el país de origen o exportador (desde donde se envía el producto) como en el país de destino o importador (donde se recibe el producto). O sea, que cuando vayas a exportar o importar, no solo tendrás que tener en cuenta las leyes de tu país sobre este tema, sino también de aquel al que vas a exportar. No obstante, vale destacar que existen mercancías que pueden gozar de beneficios arancelarios, incluso al 100% en función de acuerdos de tipo bilateral, complementarios, regionales, entre otros.

Como estimar los aranceles e impuestos aplicables

De manera muy general, podemos estimar y calcular los aranceles e impuestos aplicables a determinado producto. Aunque todo depende mayormente, insistimos, de los países implicados, el tipo de mercancía y el valor del producto; así como los incoterms y los acuerdos comerciales internacionales.

Para calcular la base imponible de aranceles e impuestos de un producto determinado lo primero que debemos hacer es contar con el nombre genérico o comercial del producto. Con este, nos dirigimos al Sistema Armonizado de Clasificación de Productos (SACLAP) que rige el comercio internacional e identificamos el nomenclador HS asociado a ese producto. Como paréntesis, es importante saber que todo producto tiene un nomenclador asignado, conocido como HS code, nombre que constituye la forma abreviada de sistema de codificación y descripción armonizada de mercancías. Esto no es más que un gran listado de números que clasifica y organiza los tipos de mercancías en códigos, y son utilizados por las aduanas para calcular los aranceles e impuestos.

Una vez teniendo el código HS de nuestro producto debemos buscar cuál es el porciento de arancel que se aplica a nuestro producto en función de los países de origen y destino. Esto lo podemos realizar a través de un facilitador web de la Organización Mundial de Comercio especializado en estos asuntos. Allí, colocamos el nomenclador y especificamos el país de origen y destino. La página nos devuelve, además del porciento de arancel asociado al producto para esos países, una amplia información al respecto. Por citar un ejemplo, allí podemos conocer si existe algún tipo de acuerdo comercial o beneficio arancelario entre ambos países con respecto a esa mercancía que pudiera sernos beneficioso.

Conociendo esto ya podemos proceder a realizar nuestra estimación. Pues simplemente sumamos el costo total de la mercancía según el incoterm empleado (que está reflejado en la factura), con cualquier otro coste asociado, como el seguro o los costes de flete (esto depende del tipo de incoterm empleado), y esto lo multiplicamos por el por ciento de arancel asociado a esa mercancía. Así obtendremos el total de aranceles a pagar en aduana por el envío. No obstante, si el país de destino aplica el impuesto por valor adquirido (IVA), también deberá pagarse. Esto puede realizarse de dos formas. En el momento en el que entra la mercancía al país o después que entra al país, o sea, en el momento de comercializarlo. Este último caso es lo que se conoce como ITBMS, que es el impuesto que termina pagando el consumidor final (el que lo compra en la tienda).

Medios de pagos alternativos

Si has leído hasta aquí y realizado mentalmente tus cálculos, es probable que tengas arqueadas las cejas al darte cuenta de lo costoso que puede ser una importación/exportación. No obstante, todo comerciante buscará siempre la forma para que su negocio se mantenga en movimiento de la manera más rentable posible. Por eso, la búsqueda de medios de pago alternativos para los pagos internacionales no dejará de ser una constante. En la actualidad, como alternativa en estos casos para reducir costos destacan las plataformas de pago electrónico y servicios de transferencia de dinero en línea. Cada uno con sus ventajas y desventajas, pero que pueden ser más o menos adecuados para unos y otros casos.

Otros costos asociados a los pagos internacionales

Comisiones por transferencia

Al realizar transferencias internacionales, es común que los bancos y servicios de transferencia de dinero apliquen comisiones por este servicio. Estas comisiones pueden ser una cantidad fija o un porcentaje del monto transferido, en dependencia del proveedor de servicios y el país de destino.

Además, es posible que se apliquen tarifas adicionales si se requiere una conversión de divisas durante la transferencia. Por tanto, es fundamental revisar y comparar las comisiones aplicadas por diferentes instituciones financieras para asegurarse de obtener la opción más favorable en términos de costos.

Costos de confirmación y verificación de pagos

Estas tarifas cubren los procesos y servicios involucrados en la validación de la transacción y la verificación de su autenticidad. Dependiendo del proveedor de servicios de pago o la institución financiera, estas tarifas pueden variar en términos de monto y métodos utilizados para confirmar y verificar los pagos.

Tarifas por servicios de notificación y seguimiento de pagos

Estos costes cubren el envío de notificaciones a las partes involucradas para informarles sobre el estado del pago y proporcionar actualizaciones periódicas sobre el progreso del mismo. La cantidad de estas tarifas puede depender del proveedor de servicios de pago y la sofisticación de los servicios de notificación y seguimiento ofrecidos.

Cargos por devoluciones o reembolsos

Estos cargos se aplican cuando se solicita la devolución de un pago o se realiza un reembolso por algún motivo, como cancelaciones, errores en la transacción o insatisfacción del cliente. Los proveedores de servicios de pago pueden cobrar una tarifa fija o un porcentaje del monto devuelto para cubrir los costos administrativos y financieros involucrados en el proceso de devolución o reembolso.

Costos de cumplimiento regulatorio

Cumplir con las regulaciones y leyes locales e internacionales puede implicar costos adicionales relacionados con el cumplimiento regulatorio, como la verificación de identidad, la prevención del lavado de dinero y la seguridad de las transacciones.

Los proveedores de servicios de pago pueden aplicar tarifas para cubrir los gastos asociados con el cumplimiento regulatorio y garantizar transacciones seguras y legales. Estos costos varían según las regulaciones aplicables en cada país y la complejidad del proceso de cumplimiento.

Recomendaciones para reducir costos asociados a los pagos internacionales

Sortear todo este angosto proceso de realizar envíos y pagos internacionales puede ser estresante. Pero lo que no podemos perder de vista es la meta a la que queremos llegar. Y para ello, necesitamos tomar las debidas que nos ayuden a reducir los costos en los que necesariamente vamos a incurrir. En este sentido, algunas recomendaciones generales que puedes considerar son:

  • Investiga las relaciones que existen entre tu banco y el banco de tu contraparte. De ser los mismos, o tener ciertas relaciones financieras, puede que no existan o se reduzcan los costos asociados a las comisiones bancarias.
  • Infórmate sobre los acuerdos comerciales vigentes entre tu país y el otro al que deseas enviar o del que planeas recibir mercancías. Esto puede significar una disminución importante de los costos de importación/exportación.
  • Asegúrate de conocer las leyes aduanales vigentes en los países hacia y desde los cuales realizarás la exportación/importación.
  • Procura no cometer errores en ninguna documentación, y siempre incluye todos los elementos necesarios para cada documento. La ausencia de algún dato o errores en ellos puede hacerte incurrir en más gastos.
  • Estudia los medios de pago que tienes a tu disposición y escoge aquellos que mejores beneficios te reporten en función de cada situación. No es obligatorio emplear siempre el mismo medio de pago, quizás algunos te sean más ventajosos para algunas situaciones, y otros para otras.
  • Negocia con tu banco las tarifas y comisiones asociadas a las transacciones. Tal vez encuentres una oferta que te pueda ser beneficiosa. Lo mismo se aplica con otros medios de pagos que brindan ofertas especiales a sus clientes.
  • Si te ves inmerso en una transacción con diferentes divisas, valora tus opciones y trata de aprovechar la tasa de cambio a tu favor.

Pues estos son los principales costos asociados a pagos internacionales. Recuerda tenerlos en cuenta en la planificación financiera de tu negocio. Solo una correcta planificación de las finanzas permitirá alcanzar el máximo potencial de tu empresa o emprendimiento. Síguenos para más consejos y noticias de negocios, mipymes, gestión financiera y gestión empresarial.