¿Cómo enviar dinero a países sin acceso a servicios bancarios tradicionales?

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El envío de dinero de un lugar a otro fue una necesidad desde tiempos inmemoriales. Tanto nuestros antepasados como nosotros mismos hemos experimentado alguna vez la necesidad de realizar o recibir un envío de dinero. Pero las condiciones en que esto se puede realizar han variado bastante desde antaño, siendo muchas veces en la actualidad un proceso bastante sencillo. Sin embargo, a pesar de que los métodos a través de los cuales se envía dinero son muy diversos, en ocasiones no están disponibles en todos los sitios. De hecho, hay países donde a veces ni los servicios bancarios tradicionales son accesibles. Entonces, ¿qué hacer es esos casos?

Servicios bancarios tradicionales

Definir cuáles son los servicios bancarios tradicionales es muy relativo, pues esto varía según el lugar, las condiciones, los sistemas, etc. No obstante, podemos al menos tener una idea general de a qué nos estamos refiriendo cuando decimos servicios bancarios tradicionales. Para ello pensemos en un banco, ¿qué podemos hacer en los bancos? De seguro una de las primeras y más obvias respuestas podría ser: abrir una cuenta. Y realmente es así.

Los servicios de cuentas que brindan las instituciones bancarias son ciertamente tradicionales. La apertura o cierre de cuentas, ya sean cuentas de ahorro o cuentas corrientes, son de las primeras acciones que solemos realizar en estas entidades. ¡Pero no las únicas! También podemos:

• Solicitar préstamos y créditos.
• Realizar gestión del patrimonio, como puede ser contratar planes de jubilación.
• Realizar inversiones.
• Aprovechar la garantía de las cajas de seguridad.
• Realizar transacciones a través de cajeros automáticos.
• Recibir asesoramiento financiero.
• Aplicar para servicios de seguro, entre otros.

¿Cómo enviar dinero a países sin acceso a servicios bancarios tradicionales?

Sin embargo, servicios bancarios tradicionales como esos no siempre están disponibles. Y cuando esto sucede, no nos podemos quedar con los brazos cruzados. Por ello, en el afán de ayudar a aquellos que se encuentren en esta situación, hemos recopilado algunas alternativas que pudieran ser muy útiles. Así que ponte cómodo y valora si alguna de estas puede servirte en tu caso.

Plataformas de dinero móvil

Si estamos en una época dónde el móvil viene a ser prácticamente otra parte más de nuestro cuerpo, ¡aprovechémoslo! Y es que con el avance de la tecnología, el móvil nos acerca a una infinidad de posibilidades, y entre ellas, el envío de dinero. En los países donde los bancos no tienen presencia, los servicios de dinero móvil son muy útiles. Las personas pueden manejar su dinero, enviando y recibiendo directamente a través de sus teléfonos móviles.

Su funcionamiento es sencillo: luego de registrarse empleando un número de teléfono, las personas pueden realizar diferentes operaciones, como depósitos, retiros, pagos o transferencias usando agentes locales (que pueden ser personas o tiendas autorizadas para ello). Las transacciones se realizan por lo general a través de SMS, USSD (un sistema de comunicación sin necesidad de Internet), o a través de aplicaciones móviles. Tienen la ventaja de permitir transferencias que suelen ser instantáneas, además de su bajo costo en comparación con las transferencias bancarias tradicionales.

Servicios de transferencia de dinero a través de agencias especializadas (Money Transfers)

Existen empresas especializadas en el envío de dinero alrededor del mundo, también conocidas como Money Transfers. Estos servicios de transferencia a través de estas agencias suelen emplearse para enviar remesas a personas que no poseen cuenta bancaria. Estas empresas suelen tener redes de agentes locales donde los destinatarios pueden recoger el dinero enviado. El proceso no tiene mucha complicación y de hecho suele ser rápido y sencillo.

En esencia, solo se necesita descargar la aplicación, registrarse y seguir los pasos intuitivos para realizar el envío. El destinatario entonces puede retirar el dinero en una de las sucursales de la agencia. Western Union, MoneyGram o WorldRemit son ejemplos de este tipo de empresas que operan en muchas regiones del mundo. Entre las ventajas de esta alternativa está su amplia cobertura global, la fiabilidad de sus operaciones y las múltiples opciones de envío que ofrece (envíos en línea, en persona y mediante aplicaciones móviles).

Monederos electrónicos

Aunque por lo general los monederos electrónicos han sido más populares en mercados desarrollados con una infraestructura bancaria establecida, su empleo se ha expandido. Su flexibilidad y accesibilidad los han convertido en una alternativa viable también en países sin servicios bancarios tradicionales.

Los monederos electrónicos son muy convenientes pues se llevan en el móvil y puedes operar con ellos a través de Internet. Con solo descargar la aplicación o acceder a su sitio oficial, basta realizar el registro ofreciendo datos básicos y ya puede comenzar a usarse. Para la recarga de fondos pueden emplearse varios métodos, como las transferencias desde otros monederos, las recargas en efectivo en puntos de venta autorizados, o incluso el envío de remesas internacionales. Con dichos fondos, la persona podrá realizar diversas transacciones, como pagos de bienes, servicios, facturas, o incluso retiro de efectivo en puntos de ventas o cajeros automáticos autorizados. ¡Tal como lo lees!, pues algunos monederos electrónicos permiten el retiro de efectivo.

Criptomonedas

Por muy distante que pueda sonar este término para algunos, las criptomonedas también son un método efectivo para el envío de dinero. En países donde no existen servicios bancarios tradicionales, las criptomonedas ofrecen una forma alternativa para recibir dinero. Eso sí, se necesita tener acceso a Internet para poder realizar las acciones de compra y transferencia de criptomonedas. Entre las ventajas de esta alternativa está su acceso global, los bajos costos de las transacciones, y la propia naturaleza descentralizada de las criptomonedas.

Si bien los servicios bancarios tradicionales pueden ser convenientes para muchos, su ausencia no implica en absoluto que las personas se vean imposibilitadas de enviar y recibir dinero. Para ello se han creado otras alternativas que suplen o sustituyen las vías tradicionales permitiendo la inclusión y ayudando a llevar estos servicios a todas las personas.